Hace unas tardes después del cole baje a casa de mi Abu a enseñarle mis progresos. Y más que tejer nos pasamos la tarde charlando.
En casa también estaba mi abuelo en silencio junto a nosotras. Me gusta pensar que yo me parezco mucho a él, porque él es un hombre de saber escuchar y que cuando habla sorprende. Aquella tarde me sorprendió porque me dijo que le estaba trayendo muchos recuerdos de su infancia. Le recordaba a su madre tejiendo a diario…y que el verme allí sentada, charlando y tejiendo le hacía acordarse de ella… Creo que es imposible escribir como me sentí gracias a mis agujas…imposible.
El tiempo ha pasado para ellos pero la sensación que les trae una tarde tejiendo es la misma que hace años.
Sentí sus recuerdos y sé que él sentía una mezcla de añoranza y alegría al sentirlos de nuevo…
¿Puede haber más razones para bajar muchas más tardes a tejer junto a ellos?
Hola Cris:
ResponderEliminarme ha gustado mucho esta entrada, también tus labores, pero ésta me ha llegado al alma.
Besos y encantada de conocerte
Muchas gracias Ana por tomarte tiempo para leer mi blog. Es curioso como alguien que no te conoce sabe ver que esta es una de las entradas que con más sentimiento he podido escribir. Seguramente porque también a ti te traigan buenos recuerdos las agujas. Un saludo.
EliminarMe emocionado leyendo esta entrada. La mantita ha quedado genial! :D Me alegro que los abuelos estén disfrutando tanto del regalo como lo va a hacer Inés.
ResponderEliminarMuchos Besitos
Patri
Gracias Patri por tomarte tiempo para leerme. Soy yo la que disfruto muchisimo bajando para que la abuela me enseñe...es la excusa perfecta para pasar todo el tiempo que se pueda. Un besote prima!!!
EliminarHola Cris
ResponderEliminarNo deje de hacerlo, los abuelos son la sabiduría y de ellos se aprende mucho, yo solo conocí a un abuelo por parte de padre y abuela por parde de madre que vivió con nosotros....
y por supuesto a tus padres tampoco los olvides.
saludo pilar